Este domingo 28 arribará al país, un sureño que ha pasado a trascender el mundo.
La nación está pendiente a la llegada de Vladimir Guerrero, nativo de San Grerorio, una comunidad del municipio de Nizao, provincia Peravia.
No se recuerda que la región se haya preparado para un acontecimiento tan trascendental, en el deporte, como el que esperamos los sureños el próximo domingo.
Y no es para menos. Vladimir Guerrero está ya en el Salón de la Fama de Cooperstown, museo que tiene su sede en Nueva York.
Es la mayor aspiración de un jugador del béisbol a nivel mundial.
Para que tengamos una idea, siendo la República Dominicana la mayor cantera del béisbol de las grandes ligas, superado solo por la sede de las mayores, los Estados Unidos, solo hemos tenido tres en el Salón de la Fama, incluyendo al de nuestro Sur, Vladimir Guerro.
Todos sabemos quién es don Juan Marichal, el de la hazaña insuperable de haber lanzado 17 entradas y ganar el partido 1-0.
El inmortal lanzador dominicano, nativo de Laguna Verde, Montecristi, región noroeste, entró a Cooperstown en 1983.
Pedro Martínez, tres veces Cy Young, nativo de Manoguayabo, provincia Santo Domingo, entró al Salón de la fama, en el 2015.
En esta semana, lo logró un sureño, celoso defensor de los jardines, quien nos llena de gloria y de orgullo por siempre, Vladimir Guerrero, un ser sumamente noble.
Recibamos, pues, a Vladimir, como lo merece, a nivel más alto del sur y de la patria que nos legaron los inmortales Juan Pablo Duarte, Francisco del Rosario Sánchez y Ramón Matías Mella.
Por Carlos Julio Féliz.-
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